5.1.13

Der Rußlanddeutsche



Segunda publicación periódica de Jakob Riffel, 1929-1945

Der Russlanddeutsche - Nº 1
 Nota: Para la preparación de la presentación de las publicaciones periódicas de Jakob Riffel nos hemos valido de investigaciones propias como también de datos y evaluaciones presentados por Daniel Beros en su tesis doctoral En búsqueda de patria. El lenguaje de la fe de los alemanes de Rusia evangélicos en Argentina, Buenos Aires, 2012. Daniel Beros es Pastor de la Iglesia Evangélica del Río de la Plata, Doctor en Teología y Profesor del Instituto Universitario ISEDET. Presentó su tesis en idioma alemán en 2004 en la Universidad Friedrich-Alexander de Erlangen-Núremberg, Alemania. La disertación fue publicada bajo el siguiente título: Heimat für Heimatlose. Die Sprache des Glaubens und die Suche nach Bodenständigkeit bei russlanddeutschen Migranten in der La Plata-Region zwischen 1925 und 1955, Neuendettelsau, Erlanger Verlag für Mission und Ökumene, 2007.
 
 Luego de cuatro años de trabajo cultural, histórico y etnográfico muy intensivo volcado a la primera publicación Rußlanddeutsche Ecke (Rincón alemán de Rusia), que apareció desde 1925 hasta 1925 como anexo de la Revista Parroquial del entonces Sínodo Evangélico Alemán del Río de la Plata (hoy Iglesia Evangélica de Río de la Plata), Riffel consideró que había llegado el momento de crear un semanario propio, dirigido expresamente a los alemanes de Rusia. Por un lado, su Rincón había ganado un amplio círculo de lectores; y por otra, se había formado diferencias entre Riffel y la dirección de la Revista Parroquial. Algunas personas no veían con demasiado agrado que Riffel enfatizara el carácter específico de los alemanes de Rusia. Además, la Revista Parroquial tenía un costo mayor y se dirigía más a lectores urbanos y no tanto rurales. Así Riffel lanzó el 5 de abril de 1929 el primer número de una publicación de edición propia, Der Rußlanddeutsche, El Alemán de Rusia (curiosamente y contradiciendo a su propio criterio de traducir Rußlanddeutscher por alemán de Rusia, Riffel mismo indicó como título en castellano de su publicación El Ruso-Alemán).

Der Russlanddeutsche
Con orgullo, Riffel lo subtituló como “Primer y único periódico para los alemanes provenientes de Rusia en Sudamérica”. Ahora bien, esto vale si se toma la revista como una publicación cultural, pues para esa época ya existía otra publicación dirigida al mismo grupo, Der Argentinische Volksfreund, que era una publicación confesional católica, iniciada en 1895 por los Sacerdotes del Verbo Divino para los católicos de habla alemana en general y provenientes de Rusia en particular.
El carácter ecuménico del semanario de Riffel se evidencia en la publicación de programas de actividades de varias Iglesias: Congregacional, Río de la Plata, Misuri, Bautistas, y también algunas actividades de parroquias católicas. Ya en el primer número, Riffel destacó que su publicación quería ser interconfesional, lo cual no significaba aconfesional. Aclaró que aún sin proclamarlo a voces en cada ocasión, un espíritu cristiano debía permear la publicación.
A la vez, Riffel destacó que así como los ancianos se sienten vinculados a su patria de origen allá en el Volga, él quería que los hijos se arraiguen en su patria, la Argentina, pero por cierto no despreciando lo que era caro y sagrado para los mayores; y conociendo su historia y su idiosincrasia. Por cierto, una visión de enorme validez para su momento histórico.
Para poder editar este semanario, Riffel instaló una imprenta propia en la zona rural de Lucas González, a pocos metros de la casa pastoral. En vista de las dificultades de este trabajo pionero, Riffel le dio el nombre del creador de la imprenta de tipos móviles: Gutenberg.

Fröhliche Jugend
La nueva publicación de 4 páginas tuvo una tirada de 2000 ejemplares. Al poco tiempo pasó a 6 y después a 8 páginas. En 1932 pasó a tener 12 páginas. Contaba con muchos avisos publicitarios de negocios, farmacias, talleres, semillerías, búsqueda y oferta de maestros alemanes e incluso búsqueda de parejas. Un dato de interés es que desde fines de 1931 incluyó el agregado mensual gratuito Fröhliche Jugend (Juventud alegre), dedicado a la educación y recreación de la juventud. Asimismo, Riffel agregaba discursos de personajes de Alemania sobre temas de ese país, en alemán y en traducción castellana. En 1937, al contar con una imprenta más moderna, amplió el formato y elevó el número de páginas a 16. Este crecimiento se lo agradeció a un apoyo financiero recibido de la “Unión Germánica en la Argentina” (Deutscher Volksbund für Argentinien) y de la “Liga de los Alemanes en el Extranjero” (Bund der Deutschen im Ausland) con sede en Berlín). Este tamaño se mantuvo hasta 1940, cuando la revista pasó a 6 páginas; y en 1942 se redujo a 4, como medida de ahorro en el contexto de la Segunda Guerra Mundial.
La publicación ofrecía un material más voluminoso y diferenciado que el Rincón. Desarrolló varias secciones: un artículo editorial, noticias provinciales e internacionales (principalmente de Alemania y de la URSS, con una marcada oposición al comunismo bolchevique), una sección con aportes de los lectores y corresponsales, una novela en varias entregas, programas de las Iglesias, y necrológicas.
Un éxito especial logró una novela ubicada en las colonias del Volga: “Der Kirgisenmichel – Ein Wolgasteppenbild aus dem 18. Jahrhundert” (“Miguel, el Kirguís – Un cuadro de las estepas del Volga del siglo XVIII”). Por el éxito obtenido, Riffel publicó este relato también como librito.

La publicación fue órgano de manifestación de las preocupaciones y experiencias de la colectividad, relacionadas fundamentalmente con los problemas del campo; y fortalecía también su identidad cultural. La dura realidad de los colonos arrendatarios, la explotación por el sistema de subarrendamiento, la situación de los campesinos pequeños y la dificultad de conseguir tierra por la venta oficial de enormes extensiones de tierra a capitalistas y terratenientes, todo ello se hizo oír con fuerza en las páginas del semanario. Una frase especialmente aguda es la siguiente: “Del Gobierno no se puede esperar nada”. En este contexto, varias voces promovían la organización de una liga de campesinos de la colectividad e incluso la fundación de un “Partido Campesino”. Otras voces pedían la afiliación a la “Unión Agraria Germano-Argentina”, que efectivamente existió en la Argentina y que ya prácticamente nadie recuerda. Luego de estas propuestas de alto vuelo, se produjo un intercambio sobre la urgencia de crear cooperativas para la defensa de los intereses de los campesinos, sobre todo frente a los comerciantes intermediarios y los consorcios cerealeros.

Margarethe Schenk-Gruß an die Wolgaheimat-1929 (1)
También se hicieron oír los maestros de las escuelas de campo, y asimismo comenzaron a decir presente las voces femeninas, con poemas, informes sobre la vida cotidiana en el campo y noticias de los grupos de mujeres. Miembros de las congregaciones y pastores del Sínodo contribuyeron con meditaciones y reflexiones sobre temas, pasajes y personajes bíblicos y también sobre las celebraciones del año litúrgico (Navidad, Semana Santa, etc.)
El régimen nacionalsocialista de Alemania, instalado en 1933, se abrió un espacio cada vez mayor en el semanario, siendo recibido y reflexionado de manera positiva en múltiples artículos, cuyas aristas polémicas ya no sólo tenían que ver con la oposición al comunismo soviético, sino también a los judíos, de acuerdo a la ideología nazi. Con el crecimiento de la ideología racista centrada en lo alemán, hubo también una nueva toma de conciencia de los alemanes de Rusia de su carácter alemán y de su vinculación con lo que llamaban la “Madre Patria”.

A la distancia que marca la historia, cabe constatar que la publicación con sus múltiples voces ha llegado a legitimar la ideología del Tercer Reich al dejarse usar como “puente” entre los portavoces de la misma y diversos grupos y situaciones en la Argentina, como por ejemplo las escuelas rurales, bibliotecas, entidades alemanas de beneficencia, actividades deportivas, agrupaciones de base del partido nazi, actos con delegados y enviados del Tercer Reich, y festejos de las congregaciones evangélicas del Sínodo del Río de la Plata. En este aspecto, la publicación difundió entre los alemanes de Rusia una comprensión que muchos compartían en el Río de la Plata y que sostenía una relación armónica y de continuidad entre la fe y lo étnico-cultural alemán (“Glaube und Deutschtum/Volkstum”); y reavivó el concepto de la “patria alemana” entre la colectividad que hacia 170 años había dejado Alemania y que había llegado a sentirse volguense.

Esta parte de la historia aún requiere de una investigación profunda, ya que se produjo un fenómeno de dominio en el que personas de ideología nazi coparon diversos espacios de diversas publicaciones, desplazando o relegando aportes de otros lectores. En el caso del Der Rußlanddeutsche, esta ideología fomentaba la toma de conciencia de la idiosincrasia alemana de los inmigrantes de Rusia y sus descendientes, que expresaban que por fin podían ser considerados alemanes y no “rusos” y apátridas. De allí el fuerte interés y la gran participación de muchos colonos entrerrianos, chaqueños y otros en las manifestaciones culturales y los elementos del universo simbólico que los vinculaban con Alemania: deporte, discursos, el Himno alemán, la bandera de la Alemania nazi, el saludo (muchos lectores firmaban sus aportes “Mit deutschem Gruß” – “Con saludo alemán”). Al estallar la Guerra, la línea editorial y muchas voces manifestaron lealtad patriótica a Alemania y a su líder.

Cabe destacar que también hubo algunas voces que expresaban una perspectiva opuesta, haciéndolo desde un enfoque religioso, subrayando la necesidad de la obediencia a Dios y de asumir una actitud patriótica argentina y de la dedicación a la patria celestial.
Rep. Sov. Soc. Autónoma de los Alemanes del Volga - 1926
En esta etapa apareció la noticia sobre la decisión de Stalin de liquidar la República Soviética Socialista Autónoma de los Alemanes del Volga y de confinar a sus habitantes a Siberia y a las regiones orientales del país.
Paralelamente siguen apareciendo informes sobre migraciones de agricultores empobrecidos a las grandes ciudades de la Argentina.
Frente al gran conflicto internacional, durante un buen tiempo la Argentina mantuvo una posición neutral, a pesar de las presiones del Departamento de Estado los EE.UU. Finalmente, a principios de 1944 Argentina rompió relaciones diplomáticas con los países del Eje. En el marco de las medidas de intervención de instituciones, empresas, publicaciones y entidades alemanas, y debido a la manifiesta simpatía de la línea editorial con el régimen alemán, en noviembre de 1944 la publicación de Riffel fue intervenida y clausurada por parte de la Autoridad Provincial. En febrero de 1945 pudo volver a aparecer, con la condición de que todos los artículos aparecieran con traducción al castellano. Pero esta nueva fase fue de poca duración. Poco antes del final de la conflagración, la Argentina le declaró la guerra al Eje. El semanario fue clausurado definitivamente el 7 de abril de 1945. Había existido durante 17 años y se publicaron 824 números en total.

Un mes después del cierre de la publicación, concluyó la Segunda Guerra Mundial, con un saldo de unos sesenta millones de muertos entre soldados y población civil; y con un costo humano, económico y político fatal para toda la humanidad. El esfuerzo ideológico y cultural volcado a la publicación de artículos, noticias y comentarios, como también todas las esperanzas vinculadas a la alemanidad o germanidad suscitadas entre los alemanes del Volga en la Argentina, se habían evidenciados como totalmente inútiles, falsos y funestos.

Dr. René Krüger


Decreto de liquidación de la República Soviética Socialista Autónoma de los Alemanes del Volga y de confinar a sus habitantes a Siberia y a las regiones orientales del país.

Una poesía sin título sobre una carneada y choriceada de Alexander y Anna Kapobel, Estación Antelo, ER, 22.9.37, Der Rußlanddeutsche 9 N° 29/446 (15.10.1937), p. 8.